Martínez Sieso, quien recordó que "el último gran incidente" ocurrió el pasado 4 de agosto por una avería en la catenaria que afectó a 2.200 pasajeros y mantuvo interrumpido el servicio durante casi 20 horas, pidió a la representante del Gobierno que "concretase lo más posible en qué puntos se va a proceder al arreglo y modernización de la catenaria y en qué puntos se va a realizar la mejora de la red", así como la inversión prevista y el calendario de ejecución.
Por su parte, la Secretaria de Estado de Transportes se limitó a manifestar que existe un compromiso por parte de Renfe Operadora y de Adif para obtener la máxima prestación del servicio, con un plan integral de mejora de la fiabilidad de los nuevos trenes, un plan de mejora de las instalaciones, así como un seguimiento exhaustivo de las condiciones de explotación de la línea sin indicar fechas e inversiones.
Martínez Sieso subrayó que el incremento de pasajeros ha sido notable pero, en su opinión, es precisamente ese incremento el que obliga "a ser más exigentes con las condiciones de calidad y las condiciones de seguridad con que se presta el servicio".