Acompañado por Cristina Mazas, portavoz de Economía del PP, Ignacio Diego explicó que el Plan Económico Financiero de Reequilibro 2010-2012 de la comunidad autónoma impediría la ejecución de las medidas del Plan de Choque anunciado por el Gobierno regional para reactivar la economía.
El Plan de Reequilibrio es un documento elaborado por la Consejería de Economía y Hacienda y que fue aprobado por el Gobierno central en la última reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera, en marzo. Contempla medidas de reducción del gasto, que se cifran en 30 millones de euros este año y 130 hasta el 2013.
Por su parte el Plan de Choque 2010-2011 consiste en una serie de inversiones en obras públicas que se ejecutarán al margen del presupuesto de la comunidad autónoma. Prevé la movilización de 282 millones de euros y la creación o mantenimiento de 5.600 empleos.
Según se explicó a los medios de comunicación, apoyado en la documentación que les ha sido facilitada, el Plan de Reequilibrio Financiero no incluye las medidas del plan de choque, porque se hace al margen del presupuesto, mediante empresas públicas, y eso computa como déficit.
Este tipo de prácticas motivaron que Cantabria tuviera que someterse a este Plan de Reequilibrio Financiero. Una operación de 60 millones de euros de la empresa pública de infraestructuras educativas GIEDUCAN en 2008 pasó a ser considerada como déficit, y esto provocó que Cantabria excediera el objetivo de estabilidad presupuestario fijado por el Ministerio de Economía.
"El Gobierno ha obviado incluir las medidas del plan de choque dentro de las financieras porque se incluirían como déficit, y si se incurre en él, la comunidad puede verse sometida a sanciones por parte del Gobierno central, que incluirían la imposibilidad de endeudarse en el futuro. Esto se traduciría en retrasos en el pago de nóminas públicas o de prestaciones".
Para el presidente del Partido Popular, al no incluir el plan de choque, esto supone que "o se ha mentido a los cántabros" o "se ha mentido al Ministerio de Economía", una actitud que calificó de "irresponsable".
En el caso de las empresas públicas, el Plan de Reequilibrio contabiliza que suman una deuda de 249 millones de euros, casi equivalente a la que aportan todas las consejerías, que es de 290 millones, y a la que, tal y como explicó Cristina Mazas, hay que añadir la deuda del ICAF (Instituto Cántabro de Finanzas), que pone como "garantía" al Gobierno.
Ignacio Diego, calificó este documento de "vergonzante, injusto e insolidario", al recoger medidas como el aumento del copago en la dependencia y las retenciones de crédito presupuestario -partidas económicas de este año que se dejarán de gastar-.
En el documento se registra como las áreas de Empleo y Servicios Sociales, Educación, y Sanidad y el Servicio Cántabro de Salud (SCS) sufren recortes que suman un 67,6% del gasto no financiero. Diego contrapuso con que la contención del gasto corriente en las empresas públicas sólo supone tres millones de euros, según consta en el plan del Gobierno, que fue facilitado a los periodistas.
En el texto, se precisa que parte la retención de crédito presupuestaria se mantendrá "en previsión de insuficiencias no previstas", y la reducción de gastos ascendería a 30 millones de euros.
En él, se contempla el incremento del copago en las prestaciones por dependencia para su "adecuación a la capacidad económica", elevando el copago de las residencias en una media del 50%, con lo que se espera ahorrar seis millones en 2010, cuatro más en 2011 y otros cinco en 2012.
La reducción del programa de ayudas a las madres se reduce "drásticamente" y de forma "progresiva", calculándose que dejen de percibirla el 75% de las madres con hijos menores de tres años, con un ahorro de cinco millones en 2010, otros cinco en 2011 y siete más en 2012.
En el caso del control del gasto corriente en las empresas públicas, el documento del Gobierno admite que es un sector que ha "experimentado un fuerte crecimiento en los últimos años" y que su naturaleza "dificulta" aplicar el "rigor" en el control de sus presupuestos. El ahorro en gastos de personal, contratos de asistencia y trabajos realizados por otras empresas permitirá bajar tres millones de gasto este año, dos más el que viene y un millón más en 2012.
Para bajar el gasto farmacéutico se avanza la existencia de un programa informático de control sobre la prescripción de recetas médicas que "identifique y clasifique" a los médicos que firman más o a mayor coste, "sin que exista en principio un ánimo represivo", con el fin de lograr ahorrar 10 millones en 2010, nueve más en 2011, y otros seis más respecto a este en 2012.
En el caso de las medidas para los gastos, se aspira a ahorrar en personal, actuando sobre las sustituciones, horas extraordinarias, absentismo o tasa de reposición, para ahorrar 10 millones en 2010, cinco más en 2011 y otros cinco en 2012 respecto al año anterior.
También se detallan las medidas sobre los ingresos, que afectan a los impuestos, como el de Sucesiones y Donaciones, el de Transmisiones, el Canon de Saneamiento, que se "pretende elevar considerablemente de forma progresiva durante los próximos años", entre otros, y se avanzan "subidas progresivas" en los próximos años para varios impuestos.
En definitiva, el plan de austeridad diseñado por el Gobierno para el periodo 2010-2012 "acaba" con su discurso progresista, porque carga los recortes sobre las prestaciones sociales.
SE ADJUNTA EN FORMATO PDF EL PLAN ECONÓMICO-FINANCIERO DE REEQUILIBRIO 2010-2012