Partido Popular en Cantabria

La portavoz de Economía del grupo parlamentario Popular, Cristina Mazas, considera que 2016 “ha sido el perfecto ejemplo de lo que es perder el tren de la recuperación. No es que no lleguemos al grupo de cabeza de las comunidades autónomas que mejor gestionan, es que vamos directamente en sentido contrario”.

En estos días en los que se ha conocido que el déficit de Cantabria llega prácticamente al 1,5%, que la deuda crece un 8% (tres puntos más que la media), y que el PIB ha crecido un punto menos que la media nacional, para Mazas lo que se confirma “es lo que hemos venido denunciando desde el inicio de la legislatura. Se ha cortado de raíz la senda de crecimiento que dejó el gobierno de Ignacio Diego. Creo que estos casi dos años son ya un suficiente margen para poder realizar esta afirmación”.

El año 2016 “no ha podido ser peor”, ya que se ha quintuplicado, prácticamente, el déficit respecto a lo previsto en los presupuestos de 2016 “que era del 0,3%”. Sin embargo, para la portavoz de Economía del grupo parlamentario Popular, la situación es aún más preocupante si se compara con el balance de 2015, el déficit fue, estructuralmente, el 0,8%, “ya que se incluían una serie de ajustes contables por importe de unos 70 millones de euros de los que más de 50 se corresponden con las obras de Valdecilla. Es decir, una situación excepcional, que no hemos tenido este año”.

En su opinión, 2016 ha sido un ejemplo de derroche “ya que en un entorno económico mejor, con crecimiento y más recursos financieros para el Gobierno de Cantabria, no tiene justificación alguna aumentar los gastos y acabar el año como la cuarta comunidad autónoma más deficitaria”. Y es que, según recuerda, Cantabria en la anterior legislatura siempre estuvo en el grupo de las autonomías que menos déficit acumulaban.

El cuadro macroeconómico de Cantabria en 2016 incluye además una deuda que ha aumentado “nada menos” que un 8%, llegando a los 2890 millones de euros, el 23% del PIB. Según recuerda Mazas, en el 2º trimestre de 2015, la deuda estaba situada en 2547 millones de euros, “y en tan sólo un año y medio aumenta en casi 350 millones de euros”.

“Y ahora la pregunta es ¿dónde ha ido ese dinero gastado de más? Pues a la vista del crecimiento del PIB, que se sitúa a un punto de la media nacional, donde está claro que no ha ido es a mejorar nuestra productividad”. Según explica, las áreas en las que se han realizado recortes como industria o empleo son precisamente “dónde no tiene sentido recortar, especialmente en empleo en donde ya se habría reducido la partida presupuestaria”.

“Pasarnos en déficit no ha mejorado nuestra capacidad productiva, y esto se refleja en este mal dato de PIB. Las políticas económicas de esta coalición de gobierno nos llevan siempre al mismo escenario, y es que no por gastar más se crece más”.

Finalmente, según subraya Cristina Mazas, 2017 “pinta aún peor, ya que lo afrontamos con un presupuesto mucho más irreal que el de 2016, tal y como ya ha advertido la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal en su último informe. Es decir, un presupuesto irreal y descompensado en sus prioridades nos volverá a llevar a un escenario como el actual. Si no hay un cambio de rumbo, dentro de un año estaremos peor”.